¡Y ya son dos semanas!

¡Y ya son dos semanitas colaborando con el proyecto NATRAS! Os cuento un poco de qué va y que es lo que hago aquí:
El proyecto va destinado a  50 niños, niñas y adolescentes entre 8 y 17 años trabajadores en la calle. Su objetivo es  proporcionarles un espacio donde recibir una formación integral y preventiva. Ésta es una población vulnerable por el tiempo que pasan en calles y mercados expuestos a abusos, discriminación y maltrato. La mayoría de ellos vive en los asentamientos aledaños a la pista suburbana de  Managua. El proyecto se divide en 4 etapas:  adaptación, iniciación, desarrollo y producción, con la finalidad de que al concluir las etapas estén preparados para incorporarse al mercado laboral con un trabajo digno. Yo estoy trabajando en la etapa de desarrollo con adolescentes entre 13 y 15 años. Les estoy dando clase de matemáticas e inglés y también impartiendo talleres con mis compañeros sobre diferentes temas relacionados con la defensa de los derechos de la  niñez y adolescencia, con un enfoque de género y de valores.  Además estamos haciendo talleres de teatro, danza, ...¡Hasta juego al fútbol! Las realidades que tienen fuera de aquí son duras pero son alegres y divertidos como adolescentes cualesquiera y yo me lo estoy pasando muy bien con ellos.

En directo desde Managua!

Ya llevo unos diitas en Managua y todos los días intentando mejorar la producción de huevos, no es fácil pero poco a poco y huevo a huevo lo conseguiré. Mañana comienzo el proceso de formación a los niños, niñas y adolescentes de Natras mediante talleres sobre la higiene y limpieza del gallinero. Es la primera vez que imparto clases así que me están ayudando en la parte teórica, la práctica será en el gallinero y será aplicar los conocimientos aprendidos.
Bueno espero que me salga muy bien y que todos los chavalos aprendan mucho y les guste mi taller. :)

¡Ya estamos en Managua!

Viernes 11 de Julio de 2014

¡Primer día en Nicaragua! Hoy nos hemos montado en una furgoneta dispuestas a recorrer Managua visitando algunos de los proyectos de la CEB. La ciudad está dentro de un bosque tropical, el verde está en todas partes, las casas son de una planta (por los terremotos) y de colores rosas, verdes, azules, morados,...Cada manzana (cuadra las llaman por aquí) parece igual que la anterior y nos parece que orientarse aquí es todo un reto. Nuestra primera parada ha sido en los comedores Olla de Soya. Éste proyecto surge en 1990 para ayudar en los problemas graves de desnutrición de niños y niñas y para madres lactantes y embarazadas. Cuentan con nutricionistas voluntarias y en general son algunas de las madres las que se encargan de hacer la comida. Hay seis comedores en Nicaragua, cinco en Managua y uno en Granada, que se financian con ayudas privadas pero no reciben subvenciones ni de la iglesia ni de las administraciones locales o nacionales. Es admirable que algunas de estas madres voluntarias sigan trabajando en el proyecto aunque sus hijos o hijas ya no formen parte, ya que en sus casas hace falta el dinero que podrían ganar trabajando en otros sitios.

Seguidamente nos acercamos a conocer la Escuela de Formación Técnica María Ángeles Callejas, que brinda cursos técnicos a mujeres adolescentes, jóvenes y adultas que se encuentran en situación de riesgo social. Aquí se imparten, entre otras, las especialidades de estética, informática, corte y confección y hostelería. Muchas de estas alumnas has formado parte del tercer y último proyecto que visitamos, Casa Hogar. Aquí se acoge a niñas y adolescentes que han sido víctimas de violencia sexual o peligra su integridad en este sentido. Reconforta, ante la dura realidad que nos presentan, oír que muchas de estas niñas ahora son mujeres que han conseguido salir de ese entorno dañino y hacer su vida independientes y fuertes.